Blogia
Olvidad@s

Literatura

Bibliotecas trabajando en red

Bibliotecas trabajando en red

Empieza el año 2015 con buenos propósitos, compromisos y promesas de los responsables políticos; también en el ámbito de las bibliotecas públicas.

Varias redes de bibliotecas están trabajando para incorporar nuevos centros a su sistema de lectura pública y a sus catálogos colectivos. También se sigue trabajando para mejorar las infraestructuras  de telecomunicaciones y la calidad de los servicios. Hacemos referencia a algunos casos, que han salido en prensa.

Las bibliotecas de la Red de Bibliotecas Públicas de la Diputación de Barcelona y las de la Red de Bibliotecas de Cataluña tendrán a partir de 2016 un catálogo colectivo único, pero en 2015 ya pondrá en marcha una pasarela informática para que los usuarios puedan consultar de forma simultánea ambos catálogos. Por otra parte, la Conselleria de Cultura de la Generalitat de Cataluña subvencionará a 160 bibliotecas públicas municipales, ubicadas en poblaciones de menos de 5000 habitantes, y que pasarán a integrase en la Red de Bibliotecas Públicas de Cataluña.

También en Cataluña, el Parlament ha firmado un acuerdo por el que el fondo bibliográfico de la biblioteca del Parlament se integre en el Catálogo Colectivo de las Universidades de Catalunya (CCUC). Dicha biblioteca aportará al CCUC casi 52.000 registros, de los cuales 20.425 son títulos nuevos. Con esta nueva incorporación de fondos, el CCUC incluirá más de cinco millones de títulos.

En Extremadura, la Junta ha acordado financiar, en el marco del Plan “Navega Cultura”’ -que la Junta pone en marcha junto con la entidad pública Red.es- la renovación de los equipamientos informáticos e infraestructuras de telecomunicaciones de las 288 bibliotecas públicas municipales extremeñas. El 20% del plan es subvencionado por la Junta y el 80% por el programa estatal.

En la provincia de Teruel, la Diputación Provincial ha elogiado el trabajo de la red de 60 bibliotecas municipales y se ha comprometido a incrementar el presupuesto anual destinado a las mismas. También se ha ofrecido asistencia técnica a bibliotecarios y ayuntamientos en temas de edificación y remodelación de locales, en nuevos equipamientos y en temas relacionados con la gestión.

En Santander, el equipo de gobierno municipal ha presentado el Plan de Dinamización de la Red de Bibliotecas Municipales de Santander para el período 2015-2017, que incluye el aumento de fondos, la mejora de los servicios y la difusión del uso y la dinamización de las bibliotecas. Un plan, por otra parte, tachado de poco ambicioso e indefinido por la oposición.

En cuanto a legislación bibliotecaria, en las Cortes de Aragón se está tramitando la nueva  Ley de Bibliotecas de Aragón, a pesar de las enmiendas a la totalidad. Dicha ley incluye la creación de un mapa de lectura pública y la Red de Bibliotecas Públicas de Aragón.

Mientras, en Canarias, el Cabildo de Fuerteventura ha solicitado al Gobierno de Canarias que se sigan los trámites parlamentarios necesarios para aprobar la Ley de Bibliotecas de Canarias; partiendo de un anteproyecto de ley de 2005 y cuyo proceso de elaboración está paralizado desde 2009, pero cuya puesta en marcha es de imperiosa necesidad para la organización y gestión óptima de los centros bibliotecarios y de archivo del archipiélago.

Acabamos con el anuncio de que el Govern de la Generalitat ha acordado declarar 2015 como “Año de las Bibliotecas”, coincidiendo con la conmemoración del primer centenario de la creación de la Red de Bibliotecas Populares de la Mancomunitat.

No podemos sino despedirnos con un buen deseo: visita, utiliza y disfruta las bibliotecas públicas. Y también os animamos a usar el buzón de quejas y sugerencias de la biblioteca, contribuyendo así a la mejora de la calidad de los servicios bibliotecarios, y a su adaptación a las necesidades de los usuarios.

* Original publicado en el blog de Inqnable.

** Fotografía: Biblioteca Jaume Fuster (Barcelona)

Bibliotecas y personas sin hogar

Bibliotecas y personas sin hogar

Personas que no tienen hogar, pero tienen derechos. Si el derecho a una vivienda, a pesar de estar reconocido en las leyes de muchos países, no está garantizado; las bibliotecas públicas siguen defendiendo y promoviendo el derecho de acceso libre y gratuito a la información y a la cultura.

A la variedad de usuarios (edad, gustos, intereses y necesidades) se unen la variedad de culturas, lenguas, así como las nuevas necesidades y la voluntad de los centros de lectura pública de acoger y prestar servicio a todos los usuarios potenciales de su población, y también a los visitantes foráneos. Bibliotecas Centrales, Bibliotecas Provinciales, Bibliotecas Públicas Urbanas, Bibliotecas Públicas departamentales o de barrio, Bibliotecas Populares, bibliotecas de centros culturales, bibliotecas móviles, biblioplayas, bibliopiscinas, lotes de libros circulantes,… Un servicio de bibliotecas públicas que evoluciona cada vez más hacia la inclusión social, fomentando el acceso a la información y a la formación. Buscando y consiguiendo un uso intensivo, que justifica unas inversiones públicas necesarias.

Defender que las bibliotecas públicas acojan a personas sin hogar no significa que se conviertan en un servicio de estancia temporal, ni que la presencia de dichas personas implique una saturación de las bibliotecas con personas que no acuden a usar sus servicios de lectura. Al contrario, se pretende que –de acuerdo con los Servicios Sociales de cada ayuntamiento- se establezca un servicio adaptado a las necesidades de las personas sin hogar, de modo que se sientan acogidas y cómodas y se animen a utilizar los servicios que la biblioteca pública ofrece (leer los periódicos, consultar internet, aprender el idioma si no lo conocen, apuntarse a un club de lectura, etc.), ofreciéndoles algunos servicios complementarios, por ejemplo: una zona de información sobre recursos sociales, una sala de café, cursos de capacitación y alfabetización para reintegrarse al mercado laboral.

La intención es convertir a las bibliotecas públicas en un servicio de “información para todos”, ofreciendo servicios adaptados a las necesidades de las diferentes tipologías de usuarios, y servicios específicos que puedan ser útiles.

Algunas bibliotecas, como las de Nueva Gales del Sur (Australia), han establecido una categoría de usuarios con dirección sin confirmar (Unconfirmed Adress) usando otros documentos para identificar a dichos usuarios sin dirección fija y que puedan así acceder a los servicios de préstamo y a otros servicios que requieran un tarjeta de usuario de la biblioteca para utilizarlos.

También algunas bibliotecas –especialmente en Estados Unidos- han establecido servicios bibliotecarios complementarios en los albergues, donde realizan entregas gratuitas de documentación (periódicos, libros e información sobre recursos sociales) e incluso organizan clases de capacitación en el uso de ordenadores.

En Canadá, al menos 5 bibliotecas públicas han contratado  trabajadores sociales –también en Philadelfia, San Francisco y Washigton- que ayudan al bibliotecario a hacer frente a la complejidad de dificultades que puede suponer atender a las necesidades de personas sin hogar.

La American Library Association (ALA) va más allá, y apuesta por reducir el número de personas sin hogar a través del compromiso de la biblioteca. El Servicio de Referencia, con listados de servicios sociales y recursos para búsqueda de empleo, y una página de dichos recursos en la web de la biblioteca, es uno de los servicios esenciales para las personas sin hogar.

La idea es que la biblioteca sirva de orientadora e impulsora de la incorporación de las personas sin hogar al mundo laboral y al acceso a los servicios públicos. Porque visibilizando la existencia de personas con necesidades –de formación, de vivienda, etc.- y apoyándolas, se camina hacia una sociedad más solidaria e igualitaria, ayudando así a que todas las personas participen de forma activa en la sociedad, gracias al acceso a la información de calidad y a la capacitación en competencias computacionales y en alfabetización.

* Original publicado en el blog de Inqnable.

** Fotografía: Biblioteca de Seattle.

Promoción e intercambio cultural en las bibliotecas

Promoción e intercambio cultural en las bibliotecas

Las bibliotecas públicas están orientadas a dar servicio a toda la población: estudiantes, trabajadores, amas de casa, jubilados, investigadores, etc. El Servicio de Lectura pública es para todos, en igualdad de condiciones y en acceso libre. Pero ¿quiénes son “todos” en el lugar en el cual se ubica y presta servicios una biblioteca pública?

En la sociedad actual los movimientos migratorios son continuos y es raro encontrar un ciudad o un pueblo de tamaño grande o mediano en donde parte de su población no sea inmigrante –inmigrantes exteriores e interiores dentro de un Estado-. Cada inmigrante es portador de una cultura, unas costumbres y muchas veces una lengua diferente, que son bienes intangibles y enriquecedores.

Así, en una sociedad multicultural, las bibliotecas públicas han de ser un lugar de encuentro e intercambio de las diferentes culturas, donde se pongan, a disposición de los usuarios, fondos bibliográficos y documentales en los que esté representada la variedad cultural e idiomática de dicha diversidad social.

Cuando se habla de integración social de los inmigrantes, las políticas públicas en este campo deben orientarse hacia el conocimiento, por parte de la población foránea, de la lengua, las costumbres y las leyes del país acogedor. Pero también hacia el mantenimiento de la cultura, lengua  e identidad originarias, destacando el pluralismo cultural y la interculturalidad como valores sociales, apostando por trabajar en el respeto a las diferencias y el enriquecimiento cultural mutuo.

Por otra parte, si las bibliotecas son lugares de acceso a la información, y promueven la cultura y el conocimiento, ¿por qué no hacer uso de los centros bibliotecarios para difundir en otros países la realidad cultural de la que somos portadores? Esto es lo que se ha hecho desde la Red de Bibliotecas Públicas Municipales de Málaga, cuando el pasado mes de julio se firmó un acuerdo con la Biblioteca de Shanghai –la segunda mayor de China, con más de 2 millones de socios y unos 40.000 usuarios diarios- por el que la ciudad de Málaga promocionará su cultura, su historia y sus ofertas de turismo en las más de 200 bibliotecas públicas de esa ciudad china. Como contraparte, la Biblioteca de Shanghai ha donado a las bibliotecas malagueñas 500 libros de reciente edición con contenidos sobre cultura china. Esta donación inicial se irá complementando anualmente con unos 100 libros más cada año, escritos en español y bilingües chino-inglés.

Si las sociedades cambian, las culturas e identidades se mezclan, los intereses por conocer otras realidades crecen y la conservación de las culturas y lenguas minoritarias peligra, las bibliotecas públicas deben trabajar teniendo en cuenta estas realidades, salvando las dificultades que ello pueda provocar y aprovechando oportunidades de crecer y darse a conocer.

 

* Original publicado en Inqnable.

¿Qué hacer en las bibliotecas?

¿Qué hacer en las bibliotecas?

Fácil respuesta: leer, escuchar música, investigar, aprender,…

Pero las bibliotecas también nos ofrecen actividades divertidas, entretenidas, lúdicas y llenas de cultura y en ocasiones de sorpresas: cuentacuentos, concursos literarios y exposiciones son algunas de ellas.

Desde este blog animamos a los profesionales bibliotecarios y a los usuarios en general a optar por la visita a las bibliotecas como “ruta cultural”, ya que muchas de ellas poseen un valor cultural e incluso histórico equiparable al de un museo o al de un edificio antiguo (iglesias, conventos, teatros, etc.).

Presentamos algunas de las actividades de interés que están abiertas al público en diferentes bibliotecas de la geografía española:

  • Deletrix: Se trata de una exposición del fotógrafo catalán Joan Fontcuberta que reoge ejemplos de libros censurados, escritos a lo largo de la historia de  humanidad, y que Fontcuberta ha ido encontrando  lo largo de 6 años de investigación por diferentes achivos y bibliotecas de Europa. Es un proyecto que se inauguró, en noviembre de 2013, en el Centre D’Art Santa Mònica (Barcelona), y que ahora llega a la Biblioteca Foral de Bizkaia. Esta exposición incluye 15 imágenes originales de Joan Fontcuberta –centradas en los siglos XVI al XIX-, 2 ejemplares de libros y 2 carteles; además se ha añadido una muestra de 9 libros censurados, depositados en la Biblioteca Foral. Se podrá visitar del 31 de octubre al 29 de noviembre.
  • Exposición "5º Centenario de la Biblia Políglota Complutense”: Con motivo del 5º centenario de la publicación de la Biblia Políglota Complutense (Alcalá de Henares, 1514), se ha inaugurado la Exposición "V Centenario de la Biblia Políglota Complutense: La Universidad del Renacimiento. El Renacimiento de la Uni­versidad" en la  Biblioteca Histórica "Marqués de Valdecilla" de la Universidad Complutense de Madrid. Dividida en cuatro secciones temáticas, la muestra cómo se desarrolló el trabajo de edición de esta obra, cómo era la vida universitaria en esa época y el impulso que supuso su publicación para la divulgación científica. Esta exposición estará abierta hasta el 31 de enero de 2015. Además se ha elaborado una exposición virtual accesible desde la web de la Biblioteca Histórica de la Universidad.
  • “La Guerra que Cambió la Historia, 1914-1918”: Diez bibliotecas de la ciudad de Valencia acogerán esta exposición itinerante, desde octubre hasta junio de 2015. La Red Municipal de Bibliotecas se ha asociado con la First World War Centenary Partnership, para intentar transmitir cuáles fueron  las causas y las consecuencias de la I Guerra Mundial, en el año del centenario del inicio de este conflicto armado, que duró 4 años y provocó unos 10 millones de muertos. La primera biblioteca valenciana en acoger esta exposición, que consta de 16 paneles explicativos, es la Biblioteca Municipal Carmelina Sánchez-Cutillas, hasta el 7 de noviembre. Las otras bibliotecas por las que pasará son: Biblioteca Joanot Martorell (17-28 de noviembre), Biblioteca Isabel de Villena (9 de diciembre al 5 de enero), Biblioteca Clara Santiró i Font (13- 25 de enero), Biblioteca Azorín (2 al 13 de febrero), Biblioteca Casa de la Reina (23 de febrero al 6 de marzo), Biblioteca Francesc Almela i Vives (13 de marzo al 3 de abril), Biblioteca Nova Al-Russafi (14-24 de abril), Biblioteca Eduard Escalante (4-15 de mayo) y Biblioteca Palau de L’Exposició (25 de mayo al 5 de junio).
  • Munduko Paisaiak = Paisajes del Mundo: Un año más, las bibliotecas públicas de Euskadi han puesto en marcha el Programa “La Biblioteca un Lugar de Encuentro”, que fomenta la tolerancia y el intercambio cultural. Dentro de este programa se integra la campaña “Munduko Paisaiak = Paisajes del Mundo” que pretende ser un modo de acercamiento a las diferentes culturas de los habitantes de cada municipio de las bibliotecas participantes, y a la inversa, acercar la biblioteca a todas los ciudadanos, vengan de donde vengan. Las actividades de esta campaña tendrán lugar a lo largo del mes de noviembre; en general se parte de una guía de lectura y se realizan diversas actividades complementarias. Por ejemplo, en la Biblioteca de Ermua y la de Iurreta(Bizkaia) han elegido el Sáhara Occidental, y darán a conocer  cultura a través de su literatura, su producción audiovisual y su música. En la biblioteca de Eibar (Gipuzkoa) tratarán sobre la cultura, la geografía y la  cocina de Nepal.
  • Biblioteca Nacional: La Biblioteca Nacional, como siempre, ofrece diferentes exposiciones de interés:

Así que ya sabes, visita las bibliotecas más cercanas para descubrir qué esconden y qué ofrecen y, cuando vayas de viaje, recuerda consultar en internet qué bibliotecas puedes visitar y de qué actividades culturales puedes disfrutar.

* Fotografía: “Deletrix: Erasmus” Erasmus, Desiderius Adagiorum chiliades Des. Erasmi Roterdami Basileae, 1541.

 

** Original publicado en el blog de Inqnable

Bibliotecas populares en América Latina: un fenómeno en crecimiento

Bibliotecas populares en América Latina: un fenómeno en crecimiento

En Michoacán (México) se celebró, a principios de septiembre la puesta en marcha del Programa Nacional de Bibliotecas Comunitarias, que contó con la presencia de profesores jubilados que van a desempeñar tareas de apoyo en el fomento de la lectura y promoción de valores culturales y sociales por medio de la misma, en las bibliotecas comunitarias de las 32 entidades federales del país mexicano.

Las bibliotecas comunitarias se instalarán en los 109 polígonos que forman parte del Programa Nacional para la Prevención de la Violencia y la Delincuencia, que intenta reducir la vulnerabilidad de los jóvenes, a través de acciones específicas para la reducción de riesgos, mejoras de los espacios de convivencia e incremento del nivel cultural. Se parte del hecho de que las bibliotecas proporcionan acceso a la información y la cultura, convirtiéndose en  una herramienta clave para ofrecer alternativas de aprendizaje y fomentar la cohesión social de la comunidad.

También en el distrito mexicano de San Luís de Potosí se están llevando a cabo tareas de rehabilitación y mejora de las infraestructuras de las dos bibliotecas municipales, entidades consideradas de gran valor por la administración municipal por su función de espacios públicos de educación, acceso a la cultura y esparcimiento.

Por su parte, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla –ubicada en el estado mexicano del mismo nombre- ha puesto en marcha un proyecto de habilitar bibliotecas o puntos de servicio en las 10 unidades regionales del estado poblano para que los estudiantes y profesores de enseñanzas medias y superiores dispongan de un fondo de consulta especializado.

También en El Paso (Texas, Estados Unidos) se ha reemplazado el viejo vehículo del bibliobús, y se han puesto en marcha dos nuevas unidades móviles –las “bookmobile”-, que, según El Paso Public Library, dan servicio a unas 20.000 personas y disponen de cerca de 1.500 títulos. Si bien El Paso no es una ciudad mexicana, aproximadamente el 80% de su población es latina, y está situada justo enfrente de la ciudad mexicana de Ciudad Juárez; separadas ambas por el Río Bravo, y que forman entre las dos un área metropolitana de más de 2 millones y medio de personas.

En Argentina hay cerca de 2.000 bibliotecas populares, cuyo origen se remonta a los círculos obreros y ateneos populares, y también  a la Comisión Protectora de Bibliotecas Populares (CONABIP), creada en 1870 por Domingo Faustino Sarmiento. Los centros de la heterogénea red de bibliotecas populares argentinas están atendidos en su mayor parte por personas voluntarias –más de 25.000-, que asisten periódicamente a jornadas de capacitación.

Se ha de tener en cuenta que el nacimiento y la importancia de las bibliotecas populares en Latinoamérica parten de la escasez de medios e infraestructuras educativas y culturales, fundándose a partir de iniciativas comunitarias locales. Actualmente conviven en esta red de bibliotecas, desde pequeñas bibliotecas ya centenarias hasta bibliotecas  fundadas recientemente que poseen una mayor y mejor infraestructura. Se trata de organismos no gubernamentales, por lo que su forma de financiación es variada (cuotas de socios, donaciones particulares, subvenciones públicas) y en muchas ocasiones escasa para llevar a cabo sus actividades.

Además, en varios países iberoamericanos, se han inaugurado las primeras  bibliotecas populares que se integrarán en la Red de Bibliotecas Populares para la Integración Americana “Néstor Kirchner”, que tiene previsto contar con al menos 7 bibliotecas, habiéndose acordado hasta ahora la apertura de las siguientes: Biblioteca de la Central Obrera Boliviana (La Paz, Bolivia), Biblioteca Popular del Centro Artiguista por los Derechos Económicos, Sociales y Culturales (Montevideo, Uruguay), Biblioteca Popular en la Facultad Regional Santa Cruz de la Universidad Tecnológica Nacional (Argentina).

* Publicado en el blog de Inqnable.

Biblio tap-tap, la biblioteca móvil haitiana

Biblio tap-tap, la biblioteca móvil haitiana

La Biblio tap-tap es una biblioteca móvil, montada en una furgoneta pintada de colores, con unas grandes puertas que al abrirse muestran sus estanterías repletas de libros para todos,  adultos y niños, escritos en criollo haitiano y en francés. Coge su nombre de los taxis compartidos en Haití; por otra parte, un medio de transporte muy usado en los países de América Central y Sudamérica.

Este es un proyecto puesto en marcha por Bibliothèques sans Frontières, en asociación con la Dirección Nacional de Libros de Haití y la Knowledge and Freedom Foundation. El objetivo de dicho proyecto es la promoción de la lectura y el acercamiento de la cultura escrita a las zonas vulnerables de Haití –prácticamente todo el país-. Además también ofrecen apoyo a las escuelas, siendo estas bibliotecas móviles, en muchas ocasiones, la única oportunidad de ofrecer acceso a la lectura a los estudiantes. Por otro lado, el gran éxito de esta iniciativa ha animado a las administraciones locales haitianas a participar en este proyecto para divulgar información sobre temas sanitarios y otros temas informativo-formativos de interés para la población.

Actualmente están funcionando 3 biblio tap-tap, que dan servicio a la región de la capital, Puerto Príncipe, y a los departamentos haitianos del Norte y del Centro. Son bibliobuses que atienden a una población de más de 3000 personas cada mes, proporcionando acceso a la información y la cultura, y facilitando la cohesión social de unas comunidades desestructuradas a causa de la pobreza y la tragedia.

Haití es un país extremadamente pobre- el más pobre de América, con el 80% de la población bajo el umbral de la pobreza- donde el gran terremoto ocurrido en enero de 2010 tuvo unos efectos devastadores: más de 300.00 muertos y cerca de 2 millones de personas sin hogar, además de muchos edificios públicos destruidos y la infraestructura de comunicaciones destrozada. Y a pesar de los cientos de millones de dólares comprometidos en ayuda, mucha de ésta no ha llegado a su destino, siendo las donaciones reales insuficientes para cubrir las necesidades del país haitiano para llevar a cabo la reconstrucción.

Por eso, un proyecto como el de las biblio tap-tap es aún más encomiable, en su objetivo de llevar la cultura y la información a un país tan pequeño como olvidado por la comunidad internacional. Un gran ejemplo de cómo las iniciativas culturales –y en particular las bibliotecas- son herramientas imprescindibles y de gran utilidad para el desarrollo sostenible y la cooperación internacional, aportando soluciones eficaces a problemas reales y urgentes.

Si te ha gustado este proyecto, tú también puedes ayudar a su continuación y ampliación, votando por su candidatura al Premio “LEAP Grants for Libraries 2014”, organizado por la librería online Better World Books UK.

 

* Artículo publicado en el blog de Inqnable.

Animación a la lectura en verano: creando y fidelizando lectores

Animación a la lectura en verano: creando y fidelizando lectores

Leer estimula la imaginación, fomenta la creatividad, aumenta el conocimiento, mejora la comprensión lectora, acompaña en horas de tedio y aburrimiento, genera temas de conversación entre los lectores, mejora la ortografía y enriquece el vocabulario, acerca a otras realidades, permite viajar en el tiempo y el espacio, …

Son tantas las ventajas del hábito de la lectura, que se podría decir que es una de las pocas adicciones que no tiene efectos secundarios nocivos; leer es bueno para el organismo, ayudando tanto en el desarrollo físico como en el psíquico. Además, existen lecturas adaptadas a cualquier edad y situación: libros para bebés, libros infantiles y juveniles, literatura en general, libros en Lectura Fácil, libros en idioma extranjero adaptados a distintos niveles de aprendizaje. Y hay temas para todos los gustos y aficiones: libros de conocimiento (arte, filosofía, deportes, ciencias, derecho, economía, historia, etc.), de viajes, de aventuras, de poesía, memorias, novela histórica,…

En verano, en muchos municipios de suelen realizar campañas de animación de la lectura, y se acercan los libros y las bibliotecas a los lugares en donde los usuarios pasan su tiempo de ocio; piscinas, playas y parques públicos son los lugares más usuales. Normalmente estas campañas de verano suelen ir enfocadas a los niños y niñas, principalmente por los beneficios que la lectura ofrece en la etapa educativa. Sin embargo, los adultos también deben ser un público objetivo de las campañas veraniegas de promoción de la lectura, porque en los hogares donde los adultos leen, la afición por la lectura se contagia a toda la familia. Por tanto, crear hábitos lectores generará mentes abiertas y con ganas de aprender, tanto en adultos como en menores. De ahí la importancia de diseñar campañas de animación a la lectura atractivas y sugerentes.

También se ha de insistir en el carácter integrador de la lectura; una forma de integración social en los barrios y que facilita la convivencia, destinada especialmente para las personas recién llegadas y los que tienen menos recursos, pero con el objetivo final de que todos los vecinos se impliquen en esta actividad dinamizadora del barrio. Además, las bibliotecas de calle son un apoyo para profesores y familias con pocos recursos, porque suponen un refuerzo escolar a la vez que una actividad lúdico-cultural en los momentos en los que la escuela está cerrada, y en los que las familias necesitan actividades gratuitas que realizar con sus hijos.

En España, el Plan de Fomento de la Lectura del Ministerio de Educación y Cultura, ya lleva 15 ediciones de la Campaña de Animación a la Lectura María Moliner. Se trata de una iniciativa que premia los planes de promoción y animación a la lectura de las bibliotecas públicas, especialmente la estimulación del hábito lector en niños y jóvenes, buscando revalorizar el valor social y cultural de las bibliotecas. En esta 15ª edición, las bibliotecas premiadas han sido: Biblioteca Municipal de Iurreta (Bizkaia) por su proyecto “Biblioteca pública: un lugar donde cabemos todas/os”, Biblioteca de Mota del Cuervo (Cuenca) por la iniciativa “La biblioteca en la red”, y la Biblioteca de San Javier (Murcia) por su proyecto intergeneracional “Contigo somos más biblioteca pública”.

Así que ya sabéis, este verano, enganchaos a la lectura y fomentad esta sana adición entre vuestros amigos y familiares. Y recordad e informad que, todo el año, en las bibliotecas públicas hay muchas aventuras e historias pendientes de ser leídas y disfrutadas, preparadas para regar la imaginación y plantar conocimiento.

* Original publicado en el blog de Inqnable.

Biblioterapia

Biblioterapia

La Biblioterapia es una ciencia en la que participan diversos profesionales: bibliotecarios, educadores, psicólogos, psiquiatras y terapeutas trabajando en forma conjunta. El personal bibliotecario actuaría como asistente del profesional de la salud.

La biblioterapia puede utilizarse sola o asociada a un conjunto de técnicas terapéuticas. Además puede realizarse de forma individual o en grupo. La biblioterapia es una actividad interdisciplinar, que puede ayudar a afrontar la realidad a aquellos individuos que pasan por una situación adversa.

Por un lado está la Biblioterapia Clínica, para ayudar en el tratamiento de enfermedades -incluidas las enfermedades propias de la edad, especialmente útil en centros de tercera edad y centros de día-  y discapacidades.

Y por otro lado, la Biblioterapia Preventiva, para ayudar a prevenir problemas de salud y de comportamiento. También la biblioterapia es útil en los problemas cotidianos: depresión, ansiedad, crisis de la jubilación, neurosis y baja autoestima causadas por situaciones de desempleo.

En general, la biblioterapia puede resultar útil para cualquier persona que necesite una orientación psicológica para afrontar algún problema en su vida familiar, social y laboral – por ejemplo: relaciones de pareja, autoestima, estrés, duelo-.

Clarice Fortkamp Caldin (2001) definió la biblioterapia como “lectura dirigida y discusión en grupo, que favorece la interacción entre las personas, llevándolas a expresar sus sentimientos: los recelos, las angustias y los deseos. De esta forma, el hombre no está más solo para resolver sus problemas, él los comparte con sus semejantes, en un intercambio de experiencias y valores”.

La biblioterapia puede ser una actividad a realizar en diferentes servicios bibliotecarios:

  • Bibliotecas de hospitales: Durante la hospitalización de un niño la lectura tiene un efecto complementario del tratamiento médico. Los niños hospitalizados no pueden decidir sobre su tratamiento pero sí puede elegir que leer o que les lean. De este modo pueden ser protagonistas y tomar decisiones. Y esto les alegra y ayuda a afrontar las circunstancias que la enfermedad les obliga a vivir. En el caso de los niños con cáncer, se ha comprobado que la biblioterapia –y la lectura en general- mejoran su autoestima. También las personas que afrontan la enfermedad de un familiar y los profesionales de la salud que viven a diario la tensión y el estrés pueden beneficiarse de la lectura terapéutica. 

Por tanto, debe haber una “biblioteca para los pacientes” junto a la biblioteca especializada en Salud, y que se debe organizar de acuerdo con las pautas de la IFLA. Puede ser un fondo complementario multidisciplinar ubicado en un anexo de la biblioteca de hospital, o un local separado, que estará a disposición de los usuarios potenciales (enfermos, familiares de pacientes y personal), y que contará con profesionales bibliotecarios especializados.

  • Bibliotecas de prisiones: En las prisiones se ha demostrado que las actividades de lectura en grupo mejoran las pautas de comportamiento y reducen los conflictos entre los reclusos. La dificultad, generalmente impuesta por la legislación y por la propia Administración, para disponer en las prisiones de personal bibliotecario que dirija un servicio de lectura, provoca en la mayoría de los casos que sean mínimas las actividades culturales que se realizan en torno a la biblioteca en las cárceles españolas. La biblioterapia en los centros penitenciarios ayuda al crecimiento personal del individuo que está sufriendo por estar privado de libertad; hecho que puede provocarle enfermedades psíquicas y emocionales, además que en muchos casos la población reclusa sufre adiciones y otras enfermedades que dificultan enormemente su inserción social.
  • Bibliotecas escolares: La biblioterapia es útil como complemento en el ámbito educativo, para ayudar en la resolución de: problemas de conducta, dificultades de integración en el ámbito escolar, conflictos entre los alumnos, dificultades de comprensión de diferentes realidades por parte de los alumnos (dislexia, TDAH, Síndrome de Down, etc.)
  • Bibliotecas públicas: Los documentos utilizados en biblioterapia no suelen haber sido creados intencionadamente con un fin terapéutico. Se puede trabajar en forma individual o grupal. Pero siempre hay que tener en cuenta la edad de los participantes, y sus intereses personales y grupales. Los usuarios de las bibliotecas públicas constituyen una población heterogénea, que también es potencialmente objetivo para la aplicación de la biblioterapia: inmigrantes con necesidades de integración social e inmersión lingüística, desempleados, ancianos, etc., y en general cualquier persona que puede encontrar en la biblioterapia beneficios para afrontar su vida diaria.

 

¿Y por qué la lectura es terapéutica?

En la biblioterapia se considera el libro como un recurso terapéutico, y por extensión cualquier formato documental (música, películas, etc.).

-          Ayuda en la curación “de dentro hacia afuera” y fomenta la independencia del paciente y su papel activo (“yo me sano”).

-          Proporciona situaciones y recursos que son útiles para el crecimiento de la persona y  para su desarrollo personal; especialmente cuando la actividad se desarrolla en grupo.

Por tanto, recetamos –y también nos “automedicamos”- lectura, individual y en grupo.

* Artículo original publicado en Inqnable.

Concursantes en las bibliotecas

Concursantes en las bibliotecas

Las bibliotecas públicas se mueven y abren sus puertas a la participación de la ciudadanía.  Especialmente en esta época, cuando se acerca el Día del Libro, pero también en otras fechas señaladas relacionadas con la lectura, las bibliotecas –especialmente las públicas- suelen organizar concursos y certámenes para animar a visitar la biblioteca y darla a conocer entre los ciudadanos.

Presentamos a continuación algunos de los más conocidos. Y os animamos a participar, explorando vuestra vena artística y literaria:

  • Concurso de fotografía digital Fotolectura 2014, organizado por el Movimiento de Bibliotecas Rurales, y en el que participan las bibliotecas públicas de la Comunidad de Madrid, cuyo tema serán los libros y la lectura. Cada participante – en las categorías infantil (hasta 12 años), juvenil (de 13 a 17 años) y adultos (a partir de 18 años)- podrá presentar, hasta el 11 de abril, hasta 3 fotografías. El concurso tiene dos fases: una primera selección entre todos los trabajos presentados en cada biblioteca participante, recibiendo los ganadores un premio en cada categoría;  después competirán los ganadores de todas las bibliotecas participantes de la Comunidad de Madrid que optarán a un premio de un cheque regalo para la compra de libros por valor de 150 euros (100 en la modalidad infantil).
  • Con motivo del Día del Libro, la Biblioteca Pública de Soria organiza el Concurso “¿De qué Libros Estamos Hablando?”, y que consiste en que los lectores, a través de varias pistas  que se irán dejando en el sitio web de la biblioteca, han de averiguar cuáles son los “libros perdidos”.
  • 2º Concurso de Microrrelatos “Menos en Más”, organizado por la Biblioteca Pública de Soto del Real (Madrid). Se admitirán hasta 3 microrrelatos por concursante, de temática libre y una extensión máxima de 150 palabras. Se establecen dos categorías: Junior (para alumnado matriculado en centros educativos de la zona) y Sénior (para personas mayores de 18 años). La fecha límite para presentar los microrrelatos es el 11 de abril.
  • Concurso de Microrrelatos “Sal a la Biblioteca” organizado por la Biblioteca Municipal de Cabezón de la Sal, con el objetivo de incentivar la escritura creativa y la imaginación, y de fomentar la lectura. Podrá participar cualquier persona a partir de 15 años, que ha de presentar un texto, original e inédito, escrito en castellano, con una extensión máxima de 150 palabras, y cuyo plazo de entrega finaliza el 31 de marzo.
  • 4º Certamen de Microrrelatos organizado por la Biblioteca de Colmenar Viejo, que propone escribir una narración en castellano de hasta 140 caracteres –sin contar título ni espacios-, que incluya las palabras “acero” y “plata” en homenaje al centenario de Platero y yo. El plazo de presentación finaliza el 30 de marzo.

Otros ejemplos destacados de concursos, pero para los que recientemente ha finalizado el plazo de participación, aunque los trabajos finalistas se presentarán en breve, son: Un concurso de canciones que tratan sobre la lectura y los libros que participan en el certamen musical “En Clave 15”, dentro del Programa “Pasión por Leer” de la Biblioteca de Castilla La Mancha. Y el 13º Concurso de Marcapáginas “Platero y Yo”, de la Red de Bibliotecas Municipales de Madrid, y cuyo tema es la obra del mismo título de Juan Ramón Jiménez.

* Original publicado en el blog de Inqnable.

Rutas literarias con la biblioteca

Rutas literarias con la biblioteca

Suele ser habitual que muchas bibliotecas públicas ofrezcan, entre sus actividades de difusión y animación a la lectura, los clubes de lectura. Es una actividad que normalmente tiene mucha aceptación entre los usuarios de la biblioteca que son lectores habituales. Pero quizá, este tipo de actividad  bibliotecaria no obtiene una gran respuesta por parte de los usuarios menos lectores, y consigue atraer a pocos usuarios nuevos a la biblioteca.

Entonces, ¿por qué no sacar esta actividad de la biblioteca a la calle, ofreciendo unas rutas literarias por el pueblo/ciudad donde está ubicada la biblioteca o por las zonas cercanas? La idea consiste en buscar libros de literatura y otros documentos que traten sobre la ciudad o el pueblo correspondiente, y hacer unas rutas literarias visitando las calles, monumentos y zonas que donde tienen lugar las novelas elegidas, o que citan los documentos seleccionados. Puede parecer que sólo en ciudades o en pueblos muy concretos puedan realizarse las rutas literarias; ciudades como Barcelona, Burgos, Lisboa, París, Madrid, Sevilla, Valencia, Vitoria-Gasteiz, etc. seguro que están en el “paisaje” de muchas obras literarias. Sin embargo, hay muchos pueblos que por alguna razón o casualidad salen citados en obras de ficción y en libros de viajes; e incluso son los protagonistas principales de documentos visuales (películas, fotografías, etc.) y de documentales en formato vídeo.

Para organizar esta actividad, los profesionales bibliotecarios –generalmente los de las bibliotecas públicas- deben seleccionar, entre el fondo de la biblioteca, aquellas obras que tengan como trasfondo su ciudad/pueblo/zona/provincia, y organizar periódicamente rutas literarias en las que, a partir de un documento previamente leído/visualizado –o solamente conocido por referencias-, los usuarios de la biblioteca y los ciudadanos no usuarios vayan haciendo un recorrido por lugares y edificios, guiados por una trama documental real o de ficción. Seguro que entre los documentos de la colección local de la biblioteca se encuentran bastantes documentos útiles para organizar esta actividad, y que en muchos casos pueden resultar sorprendentes y poco conocidos.

Algunas agencias de viajes ya realizan esta actividad, organizando rutas literarias por ciudades como Lisboa. Pessoa, Camões, José Saramago, Tabucchi fueron autores enamorados de la capital portuguesa, y en ella tiene lugar muchas de las acciones de sus obras y sus vidas, además de haber sido inspiración para su trabajo literario. Para los lectores habituales, suele ser emocionante visitar los lugares de sus obras literarias favoritas, y sentir como  si formase parte de una novela en concreto visitando los lugares que aparecen en la misma. Un ejemplo: la primera vez que visité Barcelona, uno de los lugares a los que me acerqué fue a la Plaça del Diamant, donde tiene lugar la trama principal de la obra de Mercè Rodoreda del mismo título.

La Red de Bibliotecas de Asturias realizó en 2010, con motivo del Día del Libro, un conjunto de rutas literarias por la geografía asturiana, pero parece que esta actividad no tuvo continuación. Y también algunas otras bibliotecas realizaron rutas literarias de forma puntual, pero parece que no han tenido continuación en el tiempo. Una de las bibliotecas a destacar por fomentar las rutas literarias es la Biblioteca Provincial de Huelva, que organiza viajes literarios con los integrantes de sus clubes de lectura.

Entonces, ¿por qué no ir de visita por la ciudad/el pueblo/la comarca con la biblioteca, y animar así a los ciudadanos a visitar la biblioteca pública, y demostrar que se puede encontrar en ella más que un lugar de estudio y de lectura?

* Original publicado en el blog de Inqnable.

¿Te gusta tu biblioteca?

¿Te gusta tu biblioteca?

A los profesionales bibliotecarios, en general, nos cuesta entrar en una biblioteca y observarla con “ojos de usuario”. Solemos ser bastante críticos con las debilidades de los centros bibliotecarios que visitamos, y en ellos identificamos en muchas ocasiones fallos y necesidades.

Pero quizá los usuarios, con su mirada y su experiencia ”no profesional” también suelen ser buenos observadores; especialmente aquellos usuarios que visitan diferentes bibliotecas y de diferentes tipologías. Por eso deben ser siempre bienvenidas las observaciones, quejas y desideratas de nuestros usuarios, ya que indican el nivel de interés de los usuarios porque los servicios ofrecidos sean de buena calidad y su implicación participativa con el centro bibliotecario. De hecho, en bastantes ocasiones, las quejas de los usuarios sobre los servicios bibliotecarios son de vital importancia para la evaluación de la calidad. Y también los formularios de evaluación de la biblioteca y sus servicios completados por los usuarios son una buena fuente de información para mejorar la calidad de nuestro centro bibliotecario.

El ejemplo más claro de la importancia profesional que se da al compromiso con la calidad en el ámbito bibliotecario son las Cartas de Servicio, en las que –a diferencia de las clásicas guías de usuario- se incluyen –además de las normas de uso y los deberes y derechos del usuario- los compromisos de la biblioteca con la calidad. Se trata de unos compromisos de calidad que deben ser periódicamente analizados para evaluar su cumplimiento; y la información obtenida de dicha evaluación será difundida públicamente y puesta a disposición de los usuarios para su consulta. En las redes de bibliotecas, el cumplimiento de unos criterios de calidad establecidos en las cartas de servicio ayudará a proporcionar unos servicios bibliotecarios equilibrados entre todas las bibliotecas de la red; proporcionando a sus usuarios información clara de qué servicios están a su disposición, según qué criterios y  en qué centros.

Por eso considero que los profesionales bibliotecarios –especialmente los que trabajan en bibliotecas públicas- debemos observar las bibliotecas –sobre todo la “nuestra”- como si fuésemos usuarios, para identificar mejor el valor social y económico de las bibliotecas a partir de las necesidades de información de los usuarios potenciales de la comarca/zona en la que está integrada. Tampoco se debe olvidar la importancia de los comités de biblioteca, en los que debe estar incluida una representación de los usuarios. Además hemos de tener muy en cuenta qué actividades destinadas a la difusión de información, formación y promoción de la lectura y la cultura se llevan a cabo en bibliotecas de tipología similar a la nuestra. Porque muchas veces organizar actividades no es cuestión sólo de recursos económicos, sino de tener inventiva, iniciativa y de realizar “benchmarketing”.

Hay cientos de actividades que se pueden desarrollar en las bibliotecas, desde las recurridas exposiciones –que permiten acercar a la población temas de interés, como la historia local, el entorno ambiental y los biotopos de la zona, los Días Internacionales, etc.- hasta los encuentros con autores; pasando por los clubes de lectura, las bibliovacaciones, los cuentacuentos, los conciertos, las mochilas viajeras, etc.; incluso las citas a ciegas con un libro suelen tener gran aceptación. Y también hay nuevos servicios que pueden ser útiles para atender las demandas de la población usuario, como las aulas digitales o los cursos de aplicaciones informáticas y de idiomas en línea.

El objetivo final debe ser ofrecer un buen servicio, optimizando recursos y siendo eficaz. Pero todo ello debe incluir el hacer atractiva –y necesaria- la biblioteca, tanto para los dirigentes políticos como para las entidades culturales y empresariales de la zona y los usuarios particulares en general.

* Fotografía: fachada de la Biblioteca Pública "Infanta Elena" (Sevilla)

** Original publicado en Inqnable.

Bibliotecas escolares: aprender leyendo

Bibliotecas escolares: aprender leyendo

En estos últimos meses se ha hablado mucho en los medios de comunicación sobre la calidad de la enseñanza, el informe PISA, la reforma educativa y el nivel académico del profesorado. Pero, ¿sólo en los libros de texto y en las clases ordinarias y extraescolares se adquieren conocimientos? Y ¿por qué para la mayoría de los políticos el aprendizaje es básicamente adquisición de datos y conocimientos parcelados, y no la adquisición de destrezas encaminadas a saber cómo y dónde adquirir conocimientos, y cómo y dónde aplicarlos?

Y en la base de toda adquisición de conocimientos –y de la mayoría de destrezas- está la comprensión lectora y la afición a la lectura en general. Y es en los inicios del proceso de escolarización donde las facultades cognitivas y de acceso al conocimiento deben fomentarse. De ahí la importancia de las bibliotecas escolares como pilar fundamental en la animación a la lectura, ya que es en la escuela dónde los alumnos pasan la mayor parte del día, y donde se socializan, se relacionan con su entorno y adquieren conocimientos para su desarrollo humano.

La Animación a la Lectura en la biblioteca escolar:

  • Potencia y estimula las capacidades lectoras y de comprensión de los niños y niñas.
  • Hace tomar en consideración a los libros y la lectura como fuente de información y de entretenimiento.
  • Enseña a usar una biblioteca y a valorarla.
  • Favorece un ambiente de comunicación y respeto entre los alumnos.
  • Potencia la comunicación y el entendimiento entre el profesorado y las familias.

Existen multitud de actividades a llevar a cabo para la animación a la lectura. Éstas son las más habituales, pero hay más:

-          Cuentacuentos (infantiles e intergeneracionales)

-          Mochilas viajeras

-          Clubs de lectura

-          Maratones de lectura

-          Sesiones de refranes y canciones populares

-          Sesiones musicales

-          Sesiones de actualidad: noticias y efemérides

-          Apadrinamiento lector

-          Blog colectivo de la biblioteca

-          Visitas de autores e ilustradores

Un claro ejemplo de cómo poner en práctica las actividades de animación a la lectura con éxito es el Colegio Frián (Vigo), galardonado con el Premio Nacional de Educación 2013, por el fomento de la lectura con su proyecto “A Lingua Sabe a Pan”, que contó con la implicación de toda la comunidad educativa, y cuyos objetivos eran: difundir y poner en valor la tradición oral de Galicia, y fomentar el uso de la lengua gallega entre el alumnado. En el blog de su biblioteca, titulado O Lar de Frianciño, podéis encontrar más información.

En resumen, para aprovechar al máximo las posibilidades que ofrece la biblioteca escolar, debe realizarse un plan de organización y actuación de la misma: personal y sus competencias, recursos disponibles, horarios (lectivos y no lectivos), actividades periódicas, colaboración con otras bibliotecas, etc. La biblioteca escolar –al igual que la biblioteca universitaria- debe ser considerada y gestionada como un centro de recursos para el aprendizaje y la investigación, aunque evidentemente teniendo en cuenta el nivel educativo y la edad del alumnado, y siendo realistas en cuanto a los recursos disponibles. Contando con personal formado e implicado y con iniciativa, y con el apoyo del personal del centro y de las familias se puede conseguir tener una biblioteca escolar que sea a la vez espacio de convivencia, de aprendizaje y de entretenimiento.

 

* Original publicado en Inqnable.

Fondos especiales en bibliotecas: donaciones y legados

Fondos especiales en bibliotecas: donaciones y legados

La colección local en las Bibliotecas Públicas recoge documentos sobre la localidad (historia, cultura, arquitectura, recursos cartográficos, prensa local antigua, etc.) en la que la biblioteca está integrada, obras literarias y de investigación de autores de la localidad, y toda la documentación que pueda resultar de interés por tratar sobre la localidad o por ser creada por naturales de la misma.

En muchas ocasiones, los fondos de la colección local son útiles para la investigación, e incluso en muchos casos incluyen ejemplares únicos de documentos de archivo y de obras raras/antiguas.

También los fondos especiales y el fondo antiguo depositado en Bibliotecas Especializadas y Bibliotecas Universitarias suponen unas incomparables fuentes documentales para la investigación, principalmente histórica, biográfica y literaria.

En algunos casos las donaciones y legados son el germen de una nueva biblioteca, como elAula de Metáforas “Fernando Beltrán” (Grado, Asturias), que nació gracias a la donación de 1600 libros de poesía donados por el poeta que le da nombre. Estas donaciones también eran habituales a principios y mediados del siglo XX, como el caso de la Biblioteca Ignasi Iglésias, fundada en 1935, con una parte del fondo integrado por la donación de la biblioteca particular del escritor del que recibió el nombre.

Un ejemplo de importante donación hecha en los últimos años por un escritor es la biblioteca personal que tenía en Madrid Mario Benedetti, y que donó al Centro de Estudios Iberoamericanos de la Universidad de Alicante.

Junto a las obras publicadas, en algunas ocasiones, las donaciones incluyen los archivos personales, como es el caso del Fons Montolui depositado en la Biblioteca Pública de Tarragona, u otras donaciones más recientes, como la hecha a la Biblioteca Nacional por parte del poeta jienense Manuel Ruiz Amezcua, y la realizada a la Biblioteca Municipal de Écija por parte del poeta Agustín Rivero Torres. Recientemente también se acordó la donación de la biblioteca personal que el cineasta Rafael Azcona tenía en La Rioja, y que será trasladada al Instituto de Estudios Riojanos tal cual estaba en la casa de Azcona, muebles incluidos.

En bastantes casos, las Bibliotecas Universitarias, como centros de investigación especializados, suelen disponer de fondos especiales, que suelen provenir de donaciones de catedráticos y organismos colaboradores. Por ejemplo, las colecciones especiales de la Biblioteca de la Universitat Autònoma de Barcelona, las numerosas colecciones de la Biblioteca de Humanidades de la Universidad Autónoma de Madrid, y las donaciones y legados recibidos en la Biblioteca Universidad de Zaragoza.

También muchas las Bibliotecas Universitarias suelen disponer de fondo antiguo  de libros raros, que se han ido recopilando con el paso de los años, y que en pueden incluir ejemplares únicos y de gran valor histórico y documental.

Evidentemente, las Bibliotecas Especializadas en temas históricos y las de las Academias de Historia y de Bellas Artes suelen disponer de un amplio fondo antiguo, así como ser el destino elegido por investigadores y autores para legar sus obras y bibliotecas personales.

Se trata, en todos los casos, de recursos documentales de gran utilidad para la investigación y para el conocimiento de la historia de los pueblos y ciudades de nuestro país, así como para la realización de estudios biográficos, literarios y bibliográficos. Pero que, sin embargo, no son muy conocidas entre la población y que requieren de una difusión específica.

* Original publicado en Inqnable.

** Fotografía: Cartel de la Exposición Escritores Chilenos por España, que se podrá visitar en la Sala Aifos de la Universidad de Alicante, del 13 de diciembre de 2013 al 15 de enero de 2014.

Recortes en bibliotecas igual a recortes en educación y cultura

Recortes en bibliotecas igual a recortes en educación y cultura

Las opiniones y artículos de actualidad entienden que los recortes en educación y en cultura en España son la causa de los recortes en los presupuestos destinados a las bibliotecas. Pero, ¿y si cambiamos la perspectiva? No creo que sea desacertado partir de la premisa de que los recortes en bibliotecas públicas llevados a cabo por el Ministerio de Educación, Cultura y Deportes y por las diversas Administraciones autonómicas y municipales inciden directamente y de forma negativa en la democratización y el acceso gratuito a la cultura y la educación.

Si el compromiso del Ministerio de Educación con la reducción del fracaso escolar tuviese amplitud de miras, se centraría no sólo en los contenidos curriculares sino también en la forma de aprendizaje –uno de los aspectos que muchos especialistas insisten en que es el camino por donde debe ir el sistema educativo-. “Aprender a aprender” y “lifelong learning” son dos conceptos que desde hace varios años centran los estudios sobre el futuro de la educación primaria, secundaria y universitaria. Se refieren a que preparar académicamente y educar para la vida a los alumnos debe suponer complementar los contenidos académicos con la capacidad de obtener conocimiento a través del uso de fuentes de información; conocimiento útil para el desarrollo personal y profesional a lo largo de toda la vida.

Sin embargo, si las leyes de educación no recogen la importancia y obligatoriedad de la existencia de una biblioteca escolar en todos los centros educativos, y la necesidad de que sea un profesional bibliotecario quien gestione dichas bibliotecas, muchos de los alumnos de los ciclos primarios y medios desconocerán las posibilidades y los recursos que puede ofrecer una biblioteca. Y este desconocimiento se traslada al uso que la mayoría de los estudiantes hacen de las bibliotecas públicas, considerándolos casi únicamente como lugares de estudio y de préstamo de los libros de obligatoria lectura para el curso. Y tras esta etapa, en el nivel universitario, se puede observar como los alumnos de los primeros cursos siguen teniendo unas carencias de uso y conocimiento de fuentes de información útiles para la mejora de su nivel educativo; volviendo a usar la biblioteca universitaria en los mismos términos que lo hacían hasta entonces. Y así la realidad, en muchas bibliotecas de las Universidades españolas, es que los recursos documentales –costosos y de gran valor informativo y formativo- son infrautilizados, lo que trae como consecuencia que algunos dejen de adquirirse –especialmente las bases de datos y las publicaciones periódicas electrónicas-.

Por otra parte, el cierre de bibliotecas públicas (de barrio, de distrito, en centros culturales) y la reducción de personal bibliotecario y de horarios en las mismas, supone la negación del acceso libre a la información, la formación y la cultura. Y es que la importancia y el uso en aumento de los servicios de las bibliotecas públicas en nuestro país ha de ser analizado y valorado en su justa medida; no es sólo por la crisis económica y la gratuidad que los usuarios han aumentado. Las bibliotecas públicas han mejorado y aumentado los servicios ofrecidos: alfabetización informacional, formación de usuarios, clubes de lectura, lectura fácil, cuentacuentos, formación para el empleo, acceso a internet, elaboración de recursos documentales propios, etc. Los colectivos minoritarios y los desfavorecidos encuentran en la biblioteca pública un lugar que facilita su integración social, el acceso a recursos de aprendizaje, la inclusión digital, el acceso a la información, etc. de forma libre y gratuita.

En suma, un sistema de lectura pública bien organizado y con un presupuesto suficiente ayuda a cubrir las necesidades formativas e informativas de la mayoría de la población, educando a ciudadanos más autosuficientes y capaces de generar conocimiento. Porque no toda la educación se obtiene en las aulas.

Indignantes realidades, medias verdades y otros menesteres

Estos últimos días, la prensa local y nacional se ha hecho eco de las amenazas del Alcalde de Vigo de dejar de aportar fondos al mantenimiento de la Biblioteca Central de Vigo, excusándose en que el gobierno autonómico debe ser quien asuma la totalidad del presupuesto, como hace con las bibliotecas centrales de las grandes ciudades de Galicia. Pero la realidad es que esta biblioteca es de titularidad municipal desde su creación, aunque sea una de las bibliotecas nodales de la Red de Bibliotecas de Galicia. La creación de esta biblioteca ya resultó problemática desde sus inicios, ya que, tras muchos años desoyendo las peticiones de la ciudadanía, se inauguró en Vigo, en los años 90, la Biblioteca Central. Cuando abrieron esta biblioteca cerraron la pública que había en la Calle Romil, que siempre estaba llena –literalmente- de usuarios, mientras la central estuvo durante algunos años con un catálogo de fichas en papel –escritas a máquina y corregidas a lápiz-, atendida por conserjes a punto de prejubilarse y con los ordenadores sin usar que se quedaron obsoletos. Vigo no es capital de provincia, y aunque se solicitó una biblioteca del Estado, y tras varios años de negociaciones –durante los cuales el alcalde fue mareando la perdiz y cambiando su futura ubicación- se llegó a un acuerdo con el Ministerio de Cultura, cuando estaba dirigido por González Sinde, para ubicar la futura biblioteca en un espacio del nuevo auditorio municipal. Pero una vez más, todo quedó en promesas vanas, mientras sigue viva la iniciativa popular que defiende que la nueva Biblioteca del Estado se instale en el antiguo edificio de la Panificadora –patrimonio industrial de la ciudad que año a año se va deteriorando-.

Otro caso polémico es la reciente apertura, en Pozuelo de Alarcón, de la Biblioteca Municipal Universitaria ESIC (escuela privada de negocios y marketing). Fruto de una colaboración público privada, el Ayuntamiento de Pozuelo cedió unos terrenos municipales a la escuela de negocios que implicaba la construcción de una biblioteca. Las condiciones del convenio suscrito establecen que dicha biblioteca se integra en la red municipal, que “los equipamientos, colecciones y servicios bibliotecarios estén orientados a un público general y adaptados a todas las edades“, y que “la existencia de criterios homogéneos de acceso a servicios y colecciones: horarios, tarjeta única de lector y condiciones de uso”. Sin embargo, la dirección de ESIC defiende que es una biblioteca destinada a sus alumnos, y a todos los alumnos que estén cursando 2º de Bachillerato o estudios universitarios”. Esta biblioteca podría ser un ejemplo de biblioteca integrada moderna y con instalaciones y fondos de calidad. Sin embargo, si no se cumplen los acuerdos establecidos en el convenio, podría tratarse del “secuestro” de una biblioteca de titularidad pública en beneficio de una entidad privada. 

Noticias positivas

Empezamos también hablando de Vigo, y otra de sus bibliotecas, la Biblioteca Neira Vilas –también de titularidad municipal-, y que goza de una salud envidiable, con gran afluencia de usuarios –principalmente del público juvenil e infantil-, con un fondo variado y un gran número de actividades culturales en marcha. Entonces, ¿qué se esconde detrás de la reciente amenaza del Alcalde de Vigo? ¿Será su incapacidad para gestionar la política cultural del Concello? ¿O está preparando la estrategia para las próximas elecciones?

Por otra parte, la Consejería de Cultura de Canarias se ha comprometido para el año próximo a una subida de más del 11% en el presupuesto destinado a bibliotecas y archivos, dentro de la subida general prevista para la partida destinada a políticas culturales.

Otro ejemplo de que la inversión en bibliotecas y cultura no está reñida con la obligada austeridad en los presupuestos municipales, es la Biblioteca de El Ejido que, un año después de su traslado a unas nuevas instalaciones, ha registrado el mayor aumento de su historia en número de usuarios, en número de préstamos realizados y en número de ejemplares que posee. 

Un futuro difícil pero no descorazonador

Ante la reducción de presupuesto para adquisiciones y actividades, el futuro inmediato de las bibliotecas públicas pasa por reorganizar al personal, optimizar los recursos existentes y tomar iniciativas para acercar aún más la biblioteca al ciudadano. Hay que “salir a la calle” y analizar qué colectivos no acuden a la biblioteca, porque desconocen los servicios que presta, porque no pueden acudir (ancianos, enfermos, centros asistenciales, etc.), o porque no encuentran en ella soluciones a sus necesidades de información y formación.

Los profesionales bibliotecarios han de protagonizar una revolución pacífica: sacar los libros a la calle, llevar la lectura a dónde sea necesario, reivindicar su labor y la importancia del acceso libre a la cultura. Y sí, nos pagan por ser simpáticos, por atender al usuario de forma amable y atenta, y por tener “vocación de servicio”; con crisis y sin ella.

El reto global es conseguir que no se cierre ninguna biblioteca y que la Administración asuma que el mantenimiento de las bibliotecas públicas es una prioridad. Y para ello los ciudadanos deben sentir y defender a la biblioteca pública como suya, ya que les permite un acceso igualitario, libre y gratuito a la información y la cultura. Y no vale con que los profesionales lo digamos y defendamos, tenemos que demostrarlo y “venderlo”.

* Fotografía: Biblioteca Central de Vigo

** Original publicado en Inqnable.

Centros de documentación sobre mujeres y sus derechos: trabajando en red

Centros de documentación sobre mujeres y sus derechos: trabajando en red

En España, en 1994 se creó la Red de Centros de Documentación y Bibliotecas de Mujeres, que actualmente agrupa a cerca de 40 centros de todo el Estado, y que tiene como metas:

  • Fomentar la cooperación entre los centros integrantes.
  • Elaborar herramientas de trabajo comunes.
  • Utilizar lenguajes de indización no sexistas.
  • Difundir los centros y sus fondos.
  • Promover el intercambio con otras redes similares

En el 20º Encuentro de esta Red, celebrado en Granada el 17 y 18 de octubre, se acordó una declaración en la que se pide a los responsables políticos a mantener la integridad documental de los fondos de los centros cerrados y a facilitar el libre acceso a los mismos. Y es que el hecho de que la mayoría de estos centros sean de titularidad pública ha provocado que en estos últimos años de crisis económica las Administraciones hayan optado por no aportar fondos para el mantenimiento de la actividad de algunos centros, que se han visto abocados al cierre, como son: el Centro Documental Espacio Mujeres (Santander), el Centro de Documentación de la Mujer en Castilla y León (Palencia), y el Centro de Documentación de los Servicios Municipales de la Mujer del Ayuntamiento de Avilés.

En Centroamérica, 27 centros de documentación de organizaciones feministas y de mujeres se agrupan en la Red de Centros de Documentación en Derechos de las Mujeres de Centroamérica, que tiene como objetivos:

  • Guardar y organizar la documentación histórica de las luchas de las mujeres por sus derechos.
  • Permitir ejercer el derecho a la información, como instrumento crucial de convivencia.
  • Conectar a los diferentes sectores de la población con la teoría feminista y con los elementos principales que justifican la lucha de las mujeres por sus derechos.
  • Difundir ampliamente la documentación sobre el proceso continuo de participación de las mujeres en la sociedad civil.

Los fondos y servicios ofrecidos por los centros de documentación sobre mujeres promueven y favorecen el estudio y la investigación sobre las mujeres y su labor en diferentes ámbitos: ciencia, filosofía, política, movimientos sociales, literatura, cultura, etc. Ofrecen también amplia información y documentación sobre los diversos movimientos feministas a lo largo de la historia. Y visibilizan la labor de las mujeres en pro de una sociedad más justa, democrática e igualitaria.

* Fotografía: María Moliner

** Original publicado en Inqnable.

Bibliotecas que nos acercan a África

Bibliotecas que nos acercan a África

Resulta paradójico que, a pesar de ser estar situado tan cerca, tengamos tan poco conocimiento de la realidad africana y de su historia. Aunque parezca una obviedad, es necesario recalcar que África no es un país, sino un continente que posee una gran diversidad y una importante riqueza cultural, mucho más que el continente europeo. Estos son algunos de los trazos de la radiografía de África:

  • Se hablan más de 1500 lenguas.
  • Está habitada por aproximadamente 3000 etnias.
  • Posee una gran variedad medioambiental (manglares, desiertos, estepas, sabanas, montañas, bosques tropicales y subtropicales, grandes lagos y ríos).
  • Gran variedad climática (mediterránea, tropical, subtropical, monzónica).

También dispone de gran cantidad y variedad de recursos naturales: el 97% de las reservas mundiales de cobre; el 80% de las de coltán; el 60% de las de diamantes; el 57% de las de oro; el 50% de las de cobalto; el 49% de las de platino, etc.

Sin embargo, a pesar de su riqueza cultural, natural y en recursos minerales y pesqueros, se le conoce como el “continente pobre” por sus bajos niveles de desarrollo.

Muchas personas lo único que conocen de África es: las imágenes de los inmigrantes hacinados en pateras que llegan huyendo de las guerras y la desesperanza; los vendedores ambulantes de los mercadillos; los geniales futbolistas fichados por los grandes clubes; el vecino senegalés, guineano, saharaui que saluda y sonríe;…

Por eso hoy, queremos acercarnos a las bibliotecas especializadas en África que –aparte de las de los departamentos universitarios de estudios africanos- hay en nuestro país, abiertas al público en general, y bastante desconocidas:

  • Fundación Sur (Madrid): Es el centro referente en España sobre estudios africanos. Dispone de una biblioteca con más de 20000 títulos entre los que, junto a la exhaustividad en la recogida de las monografías sobre África publicadas en España, se incluyen títulos en inglés y francés indispensables para conocer la historia y la cultura de los países africanos. Los títulos de publicaciones periódicas vivas son 60, de un total de 1300 títulos; destacando su fondo audiovisual y sonoro y su fondo cartográfico, que recoge tanto mapas actuales como históricos.

Se trata de una institución que tiene su origen en 1979 en el Centro de Información y Documentación Africana (CIDAF), fundado por los Misioneros de África, y que a partir de 2002 se convierte en la actual Fundación Sur gracias a la cooperación entre Misioneros de África, Cáritas y Manos Unidas.

La creación de esta biblioteca se debe principalmente a la iniciativa del misionero Dionisio Segura, que buscó por toda Europa y África los documentos que consideraba esenciales para constituir una biblioteca especializada en África. Gracias a su ingente labor, en la biblioteca de la Fundación Sur se pueden encontrar joyas literarias, libros descatalogados y libros raros sobre el continente africano. Además, realizan una amplia labor de extensión cultural, colaborando con radio y escuelas, para acercar a la sociedad la realidad africana y su actualidad.

  • Centre d’Estudis Africans i Interculturals (Barcelona): Es una asociación que realiza trabajos de investigación e informes sobre el continente africano, dedicándose además a tareas de divulgación y sensibilización sobre la actualidad de África.

Disponen de una biblioteca especializada en temática africana, cuyo catálogo está disponible online, y de una videoteca en línea con más de 90 vídeos que se pueden visualizar gratuitamente desde su web.

  • Centro de Estudios Africanistas (Bilbao): Impulsado por la ONG Solidaridad Internacional, tiene como objetivo constituir un punto de encuentro, diálogo y cooperación entre el África negra y Occidente. Para ellos buscan la implicación de personas de origen africano residentes en Euskadi y empresas e instituciones del “Norte”.

Disponen de un centro de documentación –en contra, su mínima catalogación disponible en línea- y una interesante base de datos de documentos, que incluye principalmente informes, que se pueden descargar libremente.

** Original publicado en Inqnable.

Desarrollo de la colección en tiempos de crisis

Desarrollo de la colección en tiempos de crisis

En tiempos de crisis no hay dinero para la cultura, aumentan los usuarios de las bibliotecas públicas ya que la gente no tiene dinero para comprar libros, las bibliotecas no dan dinero,… Estas son algunas de las afirmaciones que se oyen últimamente. Por una parte, se pretende desprestigiar los servicios públicos, incluidas las bibliotecas, por medir únicamente los beneficios monetarios de las actividades de cualquier entidad –sea empresarial o no-. Y por otra parte, se menosprecia el valor de las bibliotecas públicas, al suponer que quienes acuden a ellas y utilizan sus servicios lo hacen únicamente porque son de uso gratuito, y por desconocimiento de los amplios servicios que ofrecen las bibliotecas públicas –si bien es cierto que algunas de ellas se han (auto) convertido únicamente en bibliotecas de préstamo y lectura-.

Sin embargo, las bibliotecas públicas ofrecen un servicio de acceso a la información, a la lectura y a la cultura en igualdad y para todos. Pero, por otra parte, en estos últimos años de recesión económica, al ver gravemente reducidos sus presupuestos por parte de la Administración y quedarse con menos empleados, muchas bibliotecas y redes de bibliotecas han tenido que repensar su forma de trabajar, los bibliotecarios han tenido que asumir nuevas funciones de forma voluntaria, y se busca una mayor implicación de sus usuarios para poder mantener el crecimiento de los fondos.

Si bien es cierto que la dotación presupuestaria de las bibliotecas públicas en España ha cambiado su tendencia alcista de los últimos años y bajado a los niveles de 2007, la situación es más grave si tenemos en cuenta que la dotación asignada para adquisiciones se ha reducido a más de la mitad: de los más de 59 millones de euros de 2007 y de los casi 56 millones de 2010, se pasó en 2011 a 25 millones de euros. Esta drástica reducción ha provocado que muchas bibliotecas carezcan de presupuesto para nuevas adquisiciones, por lo que están buscando alternativas que les permitan continuar con el crecimiento y mantenimiento de sus fondos.

Actividades para mantener el desarrollo de las colecciones:

  • Donación de libros por parte de los usuarios: libros, discos y revistas que tengan en sus casas, y selección de novedades para su compra por los ciudadanos.
  • Suscripciones a revistas pagadas por los usuarios.
  • Donaciones de editoriales.
  • Mayor uso del préstamo interbibliotecario.
  • Creación de “asociaciones de Amigos de la Biblioteca”.

Las donaciones particulares no son una novedad en el mundo de las bibliotecas, aunque en muchos casos se restringían debido al coste que suponía gestionar dichas donaciones. Sin embargo, actualmente las bibliotecas públicas están más abiertas a las donaciones particulares, que en el caso de no ser adecuadas para su colección (duplicados, obsoletos, deteriorados, muy especializados) las remiten a otras instituciones u organizan mercadillos cuyos beneficios serán destinados a la compra de nuevos fondos.

El acercamiento a la biblioteca pública de usuarios nuevos ha de ser una fuente de inspiración y de oportunidades para los bibliotecarios, buscando una mayor complicidad con ellos. Para ello, la biblioteca pública debe abrirse aún más a la comunidad –algo que en tiempos de bonanza se había dejado de lado- y buscar un mayor conocimiento de los colectivos presentes en la comunidad en la que se encuentra para atender mejor sus necesidades y conseguir prestar servicios bibliotecarios adecuados a todos los perfiles de usuarios potenciales. Las nuevas tecnologías, la Lectura Fácil, la implicación y el trabajo voluntario de los profesionales bibliotecarios son instrumentos valiosos para conseguir mantener vivas las bibliotecas públicas y atender las necesidades de lectura e información de la comunidad.

Por último, quiero hacer un apunte que creo necesario. Los profesionales bibliotecarios, ante la falta de oportunidades laborales, no debemos demonizar el trabajo voluntario en las bibliotecas, ya que los voluntarios no suplen a los profesionales sino que complementan su labor. E incluso de iniciativas de voluntariado surgen maravillosas experiencias de las que los bibliotecarios pueden aprender, por ejemplo: los voluntarios lectores en residencias y hospitales, talleres de alfabetización para adultos e inmigrantes, y la creación de bibliotecas de barrio. Otra cosa es que las Administraciones pongan la etiqueta de “voluntariado” a otras cosas que no voy a nombrar.

* Orginal publicado en Inqnable.

Resistiendo a la crisis: apertura de nuevas bibliotecas en España

Resistiendo a la crisis: apertura de nuevas bibliotecas en España

Debido a la reducción de los presupuestos generales, municipales y autonómicos –especialmente en las partidas destinadas a cultura y educación-, la situación de las bibliotecas públicas, escolares y de universidades públicas no ayuda al optimismo. Las dificultades para mantener los horarios de apertura –debido principalmente a la escasez de personal y a la ausencia de nuevos contratos-, la privatización de los servicios bibliotecarios en algunas redes bibliotecarias, la obligada restricción en la compra de nuevas publicaciones y la ausencia de nuevas contrataciones de personal especializado, están provocando que se resienta la prestación de unos servicios de lectura pública de calidad.

Sin embargo, este año 2013 se han inaugurado algunas bibliotecas públicas en zonas necesitadas de este servicio, por ejemplo en: Cádiz, Málaga, Sevilla, Zaragoza, Argoños (Cantabria), la del Retiro, la Biblioteca “Ana María Matute” en Carabanchel (ambas en Madrid) y la biblioteca universitaria ESIC que se incorpora como cuarta biblioteca a la red municipal de Pozuelo de Alarcón.

También se han inaugurado bibliotecas en edificios más modernos, amplios y mejor acondicionados, que sustituyen a las anteriores, como la Biblioteca Central de Castelldefels (Barcelona), la de Viveiro (Lugo) y la Biblioteca Pública del Estado “Bartolomé J. Gallardo” en Badajoz. Mientras, en Tenerife, los vecinos reclaman la apertura de la nueva Biblioteca Pública del Puerto de la Cruz “Tomás de Iriarte”, cuya construcción costó cerca de 1,5 millones de euros y aún estando finalizada desde marzo 2011 todavía continúa cerrada (previsiblemente se abrirá en octubre). Otro ejemplo de edificio bibliotecario moderno infrautilizado es el de la Biblioteca Pius XII de Vila-Real –con un coste de construcción de 4 millones de euros-, cerrado a la espera de la autorización de la Consejería de Educación, tras el rechazo inicial al plan de usos.

En el ámbito universitario, las restricciones en los presupuestos dificultan sobre todo las renovaciones y suscripciones a publicaciones periódicas, y la adecuación de las bibliotecas universitarias como Centros de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación (CRAI). Sin embargo, se ha inaugurado alguna biblioteca en la Universidad pública, como la Biblioteca de Ciencias de la Salud de la Universidad de Cádiz en el campus de Algeciras y la nueva Biblioteca de Educación de la Universidad de Alicante.

También nos hacemos eco de una inauguración “curiosa”, la de la Biblioteca Funeraria inaugurada en el cementerio de Montjuic de Barcelona, que cuenta con un fondo especializado en los ritos funerarios de las diferentes civilizaciones, antiguas y modernas.

Para finalizar, queremos invitaros a la Exposición Medellín, la Metamorfosis, que se inaugura hoy, 26 de septiembre, en la Biblioteca Can Fabra de Barcelona, y que hasta el 30 de octubre se puede visitar en la Biblioteca Bon Pastor. Una clara muestra de cómo las bibliotecas públicas ayudan a transformar una situación crítica de conflicto social y de violencia, promoviendo una cultura de paz y ayudando a vertebrar la sociedad.

* Fotografía: Biblioteca Pública del Estado, en Badajoz.

** Original publicado en el blog de Inqnable.

Bibliotecas públicas, desarrollo y valores de la economía

Bibliotecas públicas, desarrollo y valores de la economía

En épocas de crisis económica los ataques y las manifestaciones públicas de desprestigio a las instituciones culturales no dejan de aumentar. La afirmación de que “las bibliotecas no dan dinero” resuena en la boca de algunos políticos que, ante el beneficio monetario, desdeñan cualquier otro valor de la economía.

Ciertamente, el crecimiento de una economía no se basa solamente en el crecimiento financiero. Aquellos que defienden a ultranza la libertad de mercado y la libre competencia, no tienen en cuenta muchos de los valores que configuran una sociedad humana cohesionada  y las relaciones sociales: solidaridad, confianza, respeto, justicia, cooperación, etc.

¿Por qué medir el nivel de desarrollo de un país a partir de indicadores tan asépticos como el Producto Interior Bruto (PIB)? ¿No es más desarrollado un país, y sus ciudadanos gozan de mayor bienestar, si tiene: el total de su población alfabetizada, acceso universal al sistema sanitario y educativo, niveles mínimos de contaminación, nivel de desarrollo productivo sostenible, y altos niveles de participación en la vida política? ¿La diversidad cultural no es un indicador de desarrollo social, que proporciona diferentes puntos de vista y mayores alternativas a la hora de afrontar problemas y situaciones complejas?

Respetar y difundir los valores culturales y las diferentes culturas, ideologías y religiones; fomentar el respeto a los derechos humanos; promocionar la sostenibilidad medioambiental y la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres; proporcionar acceso libre y gratuito a la información y la cultura, son labores que llevan a cabo las bibliotecas públicas en beneficio de una sociedad desarrollada, justa y democrática.

Por tanto, la existencia de un sistema de lectura pública de calidad en una región o país proporciona un mayor nivel de desarrollo cultural y social que revierte en todos los ámbitos de la vida en sociedad y también ayuda a la mejora de las condiciones de vida de cada individuo.

* Original publicado en Inqnable.