Conociendo a los Premios Nobel de Literatura: 10ª parte
Durante el día en que acaba el mundo
Una abeja ronda un geranio,
Un pescador repara una red que brilla tenuemente.
Felices marsopas saltan en el mar,
Jóvenes gorriones están jugando sobre la canaleta
Y la serpiente tiene la piel de oro como siempre debería ser.
Durante el día en que acaba el mundo
Las mujeres caminan por los campos bajo sus sombrillas,
Un borracho se adormece a la orilla del césped,
Los verduleros gritan en la calle
Y un bote de vela amarilla se acerca a la isla,
La voz de un violín persiste en el aire
Y guía dentro de una estrellada noche.
Y aquellos que esperaban relámpagos y truenos
Se han decepcionado.
Y aquellos que esperaban señales y trompetas de arcángeles
No creen que esté sucediendo ahora.
Mientras el sol y la luna estén arriba,
Mientras el abejorro visite una rosa,
Mientras rosados niños nazcan
Nadie cree que esté sucediendo ahora.
Sólo un anciano canoso, que podría ser profeta
Pero que no es profeta, porque está demasiado ocupado,
Repite mientras lía sus tomates:
Ya no habrá otro fin del mundo,
Ya no habrá otro fin del mundo.
Canción sobre el fin del mundo, de Czesław Miłosz
Volvemos a recordar que el principal objetivo de hacer un repaso cronológico de escritores premiados con el Premio Nobel de Literatura es acercar y animar a descubrir autores de calidad reconocida y en muchos casos “olvidados”. Entre los citados en esta décima parte de la serie, queremos destacar a dos poetas: el griego Odysséas Elytes, renovador de la poesía griega moderna, y el polaco Czesław Miłosz, en cuya lírica predomina la condición humana frente a graves conflictos. Para acabar esta parte, el laureado y ampliamente reconocido Gabriel García Márquez no es precisamente “un mal punto y seguido” para animar a los lectores habituales y a los neo-lectores a acudir a la biblioteca pública más próxima.
- 1978. Isaac Bashevis Singer (1904-1991). Escritor nacionalizado estadounidense, de origen polaco y raíces judías. Escritor en idioma yiddish, creció en el barrio judío de Varsovia, pero en 1935, ante el temor de la invasión nazi, se exilió a Estados Unidos. Poco tiempo después de su llegada, comenzó a trabajar como periodista en “The Daily forward”, periódico neoyorquino en lengua yiddish. La mayoría de sus obras –novelas y relatos cortos- narran historias ficticias sobre el pueblo judío-polaco, teniendo como trasfondo su historia real, su persecución y sus tradiciones.
- 1979. Odysséas Elytis (o Elytes) (1911-1996). Poeta griego nacido en Heraklion (Creta), considerado uno de los renovadores de la poesía griega del siglo XX. Publicó sus primeros poemas en 1935, en la revista “Nea ghrammata”. Entre 1948 y 1952 vivió en varios países europeos: primero en Suiza, luego en París donde estudió Filosofía en la Universidad de la Sorbona y conoció a diversos artistas (Breton, Camus, Miró, Matisse, Picasso, etc.); posteriormente viajó a España y también visitó Londres. El ciclo poético “To Áxion Esti” es considerado por muchos su mejor obra, por la que se le concedió el Premio Nacional de Poesía en 1960 y que fue musicalizada por el reconocido compositor Mikis Theodorakis, con lo que la popularidad de la obra de Elytis trasciende el ámbito literario y pasa a formar parte de la cultura popular griega y se convierte en uno de los “clásicos modernos” de la poesía griega.
- 1980. Czesław Miłosz (1911-2004). Poeta nacido en Lituania, de donde era originaria su familia, aunque pronto se trasladaron a vivir a Polonia. Durante la 2ª Guerra mundial participó de forma activa en la resistencia polaca frente a la ocupación nazi. En 1951 se exilió en París, y 10 años más tarde se trasladó a Berkely para ocupar la Cátedra en Lenguas y literaturas Eslavas de la Universidad de California. Además de como poeta, ejerció como traductor al polaco de obras literarias en inglés y francés.
- 1981. Elias Canetti (1905-1994). Nació en Bulgaria, en el seno de una familia sefardí, por lo que su lengua materna era el ladino. En 1911, se trasladó con su familia a Gran Bretaña, donde aprendió el inglés, que se unió así a los otros idiomas que conocía: además del ladino, el búlgaro y el alemán. Tras la muerte de su padre, la familia se instaló en Viena, motivo por el cual empezó a escribir en alemán. En 1938, tras la Noche de los Cristales Rotos, se trasladó a Londres, obteniendo la nacionalidad británica en 1952. Canetti fue muy crítico con la mentalidad y las costumbres inglesas, y su objetivo era emigrar a Suiza –la Suiza de lengua alemana-, trasladándose finalmente a Zurich en los años 70. Canetti hace del idioma alemán su lengua propia y de creación, la lengua de sus obras literarias: ensayos, obras teatrales, memorias y diarios, colección de notas y aforismos, ensayos, y su única novela “Masa y poder”. Sobre la importancia de la elección del alemán por Canetti como lengua propia y de su sensibilidad hacia su origen sefardí, hay un interesante artículo titulado “Elias Canetti: vivir en la lengua”, de Tomás Albaladejo Mayordomo. En reconocimiento a la contribución de Canetti a la literatura alemana, se le concedió en 1972 el premio Georg-Büchner Preis.
- 1982. Gabriel García Márquez (1927-2014). El insigne escritor y periodista colombiano, conocido como Gabo (y también como Gabito) por sus más allegados, quizá no necesite presentaciones. Puede gustarle al lector, o no gustarle, el estilo de realismo mágico de las novelas de García Márquez, pero lo que es seguro es que su prosa no le dejará indiferente. Aunque estudiante de Derecho en la Universidad de Bogotá, inició su labor profesional como periodista, en 1946, primero como redactor en “El Universal”, un periódico de Cartagena de Indias, y más tarde en “El Heraldo” de Barranquilla y en “El Espectador” de Bogotá, a partir de 1952. Trabajó también para la agencia cubana de noticias “La Prensa”. De ideas izquierdistas, su rechazo a las dictaduras colombianas y su amistad con Fidel Castro le animaron a exiliarse voluntariamente en México, en los años 60. La fama mundial de García Márquez comenzó con la publicación de su novela “Cien años de soledad” (1967) – traducida a más de 30 idiomas y ganadora de 4 premios literarios internacionales, y considerada la obra maestra del realismo mágico- que narra en tono épico la historia de la familia Buendía, en el pueblo colombiano de Macondo –también ideado por García Márquez y fundado en la ficción por el personaje José Arcadio Buendía-. De las restante novelas de Gabo es difícil destacar unas sobre otras, por lo que nos limitaremos a citar sus títulos, por orden cronológico de publicación: “La hojarasca” (1955), “El coronel no tiene quien le escriba” (1961), “La mala hora” (1962), “El otoño del patriarca” (1975), “Crónica de una muerte anunciada” (1981), “El amor en los tiempos del cólera” (1985), “El general en su laberinto” (1989), “Del amor y otros demonios” (1994) y “Memoria de mis putas tristes” (2004). También escribió varios libros de cuentos y 3 libros de relatos periodísticos –hemos de reconocer que, personalmente, el dinamismo del estilo periodístico de Gabo y su “forma de contar” nos entusiasma-. Aquejado de cáncer linfático desde 1999, a partir de entonces su producción literaria fue escasa. En 2007, en el marco del 4º Congreso Internacional de la Lengua Española, celebrado en Cartagena de Indias (Colombia) se publicó una edición conmemorativa de “Cien años de soledad”, que contó con la propia supervisión de García Márquez. Para saber más sobre la vida y la obra de García Márquez, se puede consultar elmonográfico que le han dedicado en la web del Centro Virtual Cervantes. Las acciones en reconocimiento al valor literario de Gabo se han sucedido incluso después de su fallecimiento; destacando especialmente la inauguración, en diciembre de 2015, del Parque Biblioteca Gabriel García Márquez, perteneciente al Sistema de Bibliotecas de Medellín. Lo que si no ha estado exento de polémica ha sido la venta de su archivo personal, por parte de la familia del Nobel colombiano, a la Universidad de Texas –que ha anunciado que se podrá consultar en formato digital a partir de octubre de 2016-, en lugar de haber llegado a un acuerdo con el gobierno colombiano para que se quedase en su país, a disposición de los investigadores.
* Original publicado en el blog de Inqnable.
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