BCN-BCN en 4x4
No se me ha ocurrido un título mejor tras empezar a leer el blog testigo de esta aventura: la vuelta al mundo en 10 años, en una furgoneta 4x4, desde y hasta Barcelona. Porque lo importante no es el título sino la historia que esconde y muestra.
Un buen día el destino no les jugó una mala pasada. El camino de Anna se cruzó en el de Pablo, que después de un tiempo le hizo una proposición indecente: ¿quieres venir a dar la vuelta al mundo conmigo?
Así comenzó a picarle a Pablo el gusanillo de escapar:
"Era fines de julio y había huido al sur de África aprovechando mi mes de vacaciones y una baja extra de quince días por problemas mentales. Mi cabeza ya no funcionaba bien. Era grave, pero no tanto como para estar en la lista de espera de un psiquiátrico. Sólo había comenzado a cuestionarme el sentido de lo inevitable.
Los carteles de las calles y la televisión proclamaban que la única alternativa era tomar Coca Cola. Entonces tu mundo se convertiría en una fábrica que radiaría felicidad al espacio exterior. Los tipos de Atlanta ya habían comenzado su campaña para reemplazar la cocaína de la fórmula original por ácido lisérgico.
Sí, también, yo trabajaba en el maravilloso mundo de la publicidad. Hacía anuncios, desarrollaba ideas que te ayudaban a elegir la mejor cerveza, el coche que se adaptaba mejor a tus necesidades, el hotel con los mejores servicios. Me gustaba esa tensión, esa acumulación de desafíos de ingenio con fecha y hora de caducidad. Me podría haber dedicado a la poesía, pero esto pagaba mejor.
En mi descargo declaro que nunca hacía exactamente lo que me pedían. Debía contar historias en poco espacio pero siempre escribía demasiado. Si, muy bonito, pero quítale la mitad de las palabras. Como si escribir fuera amontonar piedras. Utilizaba expresiones raras, metáforas con acentos extranjeros y de vez en cuando dejaba caer alguna propuesta ingeniosa. Últimamente me había empecinado en encontrar la manera de colar una protesta callejera dentro de una campaña. Tomates kamikaze suicidándose contra el suelo para no caer de nuevo en los brazos de una lechuga; un okupa cubierto de piercings vendiendo hipotecas para un banco respetable; supuestas frases satánicas disimuladas en los textos que anunciaban una ginebra verde. Sin duda era mi subconciente enviando mensajes desde el otro lado. Algo andaba mal."
Y ahora creo que no quiere parar, feliz en sus andanzas con Anna y la Muchobicho. Qué corto se hace a veces el viaje.
Hasta el 30 de abril, se podrá ver en el Centro de Enfermedades Tropicales de la Avenida Drassanes en Barcelona, una exposición con fotografías de esta vuelta al mundo. También estarán con su libro en la Fira del Llibre de Barcelona, el 23 de abril, en Plaça Universitat.
1 comentario
Pablo + Anna -
Bienvenida, bienvenidos a La vuelta al mundo en 10 años, que sin duda serán algunos más.
Dos abrazos!
Pablo + Anna